Las organizaciones necesitan uniformidad a la hora de gestionar sus aplicaciones tradicionales y modernas en un panorama de infraestructuras variado que abarca centros de datos, nubes privadas y públicas, y perímetros.
Aplicar un enfoque moderno de infraestructura hiperconvergente (HCI) puede ayudar a reducir la complejidad de la nube híbrida, aumentar la productividad y maximizar la inversión, pero solo si sabe qué debe evitar:
• Crear algo nuevo (desde el principio).
• Modernizar solo lo que ve en este momento.
• Separar las aplicaciones tradicionales y las nativas de nube.
• Cambiar (de nuevo) su enfoque de gestión.
• Desarrollar una gestión manual del ciclo de vida.
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